English translation of this conversation is below.
ROSSANA LONGO:
Bienvenidos a Elevate Boulder Podcast, una serie que amplifica las voces de las personas que participaron en el programa Elevate Boulder.
Lanzado como un programa piloto de ingresos garantizados, Elevate Boulder brindó apoyo económico directo a residentes de bajos ingresos en la ciudad de Boulder. Las familias seleccionadas recibieron 500 dólares al mes durante dos años, sin restricciones, con la confianza de que cada persona sabría cómo usar ese dinero según sus propias necesidades.
Financiado por el American Rescue Plan, Elevate Boulder ofreció algo poco común: un respiro. La posibilidad de cubrir gastos básicos, atender la salud, reducir el estrés y planificar con un poco más de calma.
En este episodio, escuchamos a Ana y Pedro, inmigrantes, padres de familia y residentes de Boulder, quienes comparten lo que ese respiro significó para su familia de siete personas.
ANA:
Tengo 39 años. Soy mamá de cinco niños. No trabajo fuera de casa; me dedico al hogar con ellos.
PEDRO:
Tengo 39 años. Este programa ha sido una ayuda para la familia. Somos siete.
ROSSANA LONGO
Ana y Pedro se enteraron del programa a través de la escuela de sus hijos, una puerta de acceso clave para muchas familias.
ANA:
La aplicación me la pasó la trabajadora de la escuela de mis niños, la de recursos humanos en Junior Hill. Ella nos la pasó y él fue quien aplicó, porque necesitaban comprobantes de ingresos.
ROSSANA LONGO:
Pedro trabaja en la construcción, en un empleo físicamente exigente que depende del ritmo de la economía.
PEDRO:
Estoy trabajando en una compañía donde hacemos estructuras para las casas, todo con madera. Es un trabajo duro.
ROSSANA LONGO:
Cuando las horas de trabajo bajaron, los gastos no se detuvieron.
ANA:
Cuando le bajaron las horas de trabajo a él, pagar la renta se volvió difícil. El mandado está súper caro. Entonces este apoyo fue un extra que no contemplábamos en el cheque, y ayudó mucho.
PEDRO:
En un tiempo me lastimé en el trabajo. Tuve que descansar y, en ese mismo tiempo, estaban despidiendo gente. Yo decía: ‘¿Qué voy a hacer?’ Pero gracias a Dios aquí sigo, y con este programa fue una gran ayuda.
ROSSANA LONGO:
A diferencia de otros apoyos, Elevate Boulder ofreció algo fundamental: libertad.
ANA:
Es bueno porque a veces, como con las estampillas, sólo puedes usar el dinero para ciertas cosas. Con esta ayuda, uno puede pagar la renta, la aseguranza del carro, consultas médicas… gastos que a veces uno no contempla.
ROSSANA LONGO:
Para Ana y Pedro, el impacto fue más allá del dinero.
ANA:
Nosotros, que somos inmigrantes, no tenemos las mismas oportunidades de trabajo que la gente de aquí.
Mis hijos, como nacieron aquí, tienen seguro médico. Pero nosotros no. Cuando él se lastimó, fue difícil ir a un lugar donde los gastos fueran algo que pudiéramos pagar. Uno hasta la piensa para enfermarse, porque son gastos que no tiene contemplados.
ANA
Este es un programa de mucha ayuda. Tiene beneficios económicos y emocionales, porque uno ya no se preocupa tanto. Y entonces puede disfrutar un poquito más del tiempo con la familia.
A veces uno se preocupa por buscar otro trabajo, pero no tiene tiempo para la familia. Yo tengo dos adolescentes, y es difícil mantenerlos ocupados y bien encaminados.
ROSSANA LONGO:
Pedro coincide. Para él, el mayor valor del programa fue el tiempo que recuperaron como familia.
PEDRO:
Casi siempre he estado en dos trabajos, pero como dice ella, nunca tienes tiempo para la familia.
Un programa como este te da la oportunidad de estar un poquito más con tu familia, de ver a tus niños crecer. A lo mejor hasta de tomar unas vacaciones.
Todos tenemos derecho a estar con nuestra familia.
ROSSANA LONGO:
Con el fin del programa acercándose, la familia sabe que vienen nuevos retos.
PEDRO:
Pues tocará buscar otro trabajo. No hay de otra. Venimos a buscar el bienestar para nuestra familia.
Tenemos una adolescente que probablemente va a estudiar la universidad. Eso es un gasto grande que todavía no tenemos.
ANA:
Mi hijo está en Boulder Tech. Quiere seguir estudiando, pero vienen otros gastos: otro carro, gasolina, la aseguranza que sube… todo se va acumulando.
No puedo quedarme sin carro porque tengo que llevar a los niños a la escuela, a citas médicas. Todo eso hace que los gastos suban mucho.
ROSSANA LONGO:
Antes de despedirnos, les pedí un mensaje final.
ANA:
Mi mensaje es que Elevate Boulder ayudó mucho a mi familia. Nos ayudó a pasar tiempo juntos, como familia, sin preocuparnos tanto por lo económico.
PEDRO:
Este programa fue muy bueno para nosotros y ojalá continúe. No sólo por nosotros. Hay muchas otras familias que también lo necesitan.
Muchas gracias por habernos elegido esta vez.
OUTRO
ROSSANA LONGO:
Las historias que escuchamos en Elevate Boulder Podcast nos recuerdan algo esencial:
cuando las personas tienen estabilidad, pueden planificar; cuando pueden planificar, pueden respirar; y cuando pueden respirar, pueden construir un futuro.
Mientras este programa piloto llega a su fin, la ciudad de Boulder y sus socios comunitarios continúan explorando qué viene después, y cómo apoyos basados en la confianza pueden seguir fortaleciendo a las familias.
Gracias a Ana y Pedro por compartir su historia. Y gracias a ustedes por escuchar.
Pueden encontrar más historias en audio, fotografía, video y texto en BoulderColorado.gov, buscando Elevate Boulder Stories.
Estas historias fueron creadas por un equipo de narradores locales, incluyéndome a mí, Rossana Longo, quienes creemos que escuchar con atención es la base de comunidades más fuertes y compasivas.
English Translation
ROSSANA LONGO:
Welcome to Elevate Boulder Podcast, a series that amplifies the voices of people who participated in the Elevate Boulder program.
Launched as a guaranteed income pilot, Elevate Boulder provided direct cash support to low-income residents in the city of Boulder. Selected families received $500 a month for two years, with no restrictions, trusting that each household would know how best to use that money according to their needs.
Funded by the American Rescue Plan, Elevate Boulder offered something uncommon: breathing room — the possibility to cover basic expenses, address health needs, reduce stress, and plan with a little more calm.
In this episode, we hear from Ana and Pedro, immigrants, parents, and Boulder residents, who share what that breathing room meant for their family of seven.
ANA:
I’m 39 years old. I’m the mother of five children. I don’t work outside the home — I dedicate myself to the household and to them.
PEDRO
I’m 39 years old. This program has been a help for our family. We are seven people.
ROSSANA LONGO:
Ana and Pedro learned about the program through their children’s school — a key access point for many families.
ANA:
The application was given to us by the worker at my children’s school, the human resources staff at Junior Hill. She passed it on to us, and he was the one who applied, because they needed proof of income.
ROSSANA LONGO:
Pedro works in construction, a physically demanding job that depends on the rhythm of the economy.
PEDRO:
I work for a company where we build structures for houses, all with wood. It’s hard work.
ROSSANA LONGO:
When work hours were cut, expenses did not stop.
ANA:
When his work hours were reduced, paying the rent became difficult. Groceries are very expensive. So this support was an extra that we didn’t expect in the paycheck, and it helped a lot.
PEDRO:
At one point I got injured at work. I had to rest, and during that same time, people were being laid off. I kept thinking, ‘What am I going to do?’ But thank God I’m still working, and with this program, it was a great help.
ROSSANA LONGO:
Unlike other forms of assistance, Elevate Boulder offered something fundamental: freedom.
ANA:
It’s good because sometimes, like with food stamps, you can only use the money for certain things. With this help, you can pay rent, car insurance, medical visits — expenses that you don’t always plan for.
ROSSANA LONGO:
For Ana and Pedro, the impact went beyond money.
ANA:
We, as immigrants, don’t have the same job opportunities as people who are from here.
My children, because they were born here, have medical coverage. But the two of us don’t. When he got injured, it was hard to go somewhere with costs that we could afford. You even think twice about getting sick, because those are expenses you’re not prepared for.
ANA:
This is a program that helps a lot. It has both economic and emotional benefits, because you don’t worry so much.
And then you can enjoy a little more time with your family. Sometimes you worry about getting another job, but then you don’t have time for your family. I have two teenagers, and it’s difficult to keep them on track and occupied so they don’t get into other things.
ROSSANA LONGO:
Pedro agrees. For him, the greatest value of the program was the time they regained as a family.
PEDRO:
I have almost always worked two jobs, but like she says, you never have time for your family.
A program like this gives you the opportunity to be a little more present with your family, to watch your children grow. Maybe even to take a vacation.
Everyone has the right to be with their family.
ROSSANA LONGO:
As the program comes to an end, the family knows new challenges are ahead.
PEDRO:
We’ll have to look for another job. There’s no other option. We came here looking for well-being for our family.
We have a teenager who will probably go to college. That’s a big expense we don’t have covered yet.
ANA:
My son is at Boulder Tech. He wants to continue studying, but more expenses are coming — another car, gas, higher insurance costs. Everything adds up.
I can’t be without a car because I need to take the kids to school, to medical appointments. All of that makes expenses go up a lot.
ROSSANA LONGO:
Before we said goodbye, I asked them for a final message.
ANA:
My message is that Elevate Boulder helped my family a lot. It helped us spend time together as a family, without worrying so much about money.
PEDRO:
This program was very good for us, and I hope it continues. Not just for us — there are many other families who need it.
Thank you very much for choosing us this time.
ROSSANA LONGO:
The stories we hear through Elevate Boulder Podcast remind us of something essential:
when people have stability, they can plan; when they can plan, they can breathe; and when they can breathe, they can build a future.
As this pilot program comes to an end, the City of Boulder and its community partners continue exploring what comes next, and how trust-based support can continue strengthening families.
Thank you to Ana and Pedro for sharing their story.
And thank you for listening.
You can find more stories in audio, photography, video, and text at BoulderColorado.gov, by searching Elevate Boulder Stories.
These stories were created by a team of local storytellers, including me, Rossana Longo who believe that listening deeply is the foundation of stronger, more compassionate communities.